Procesando...


FLORES SILVESTRES

*No apagues tus ojos
No los apagues
Este camino
No lo conozco

*Los relámpagos
iluminan la abundancia de calas abiertas
Mi cuerpo
el viento
y las olas

*Al calor de la tarde
las mujeres sueltan sus ropas
y desnudan sus cabellos

*Te retiras al dormitorio
cansado
envuelto de dolor
Aún están las huellas
del licor que impregnó tu boca
Vienes de una lucha amorosa
exaltado
por un profundo amor

*Una lavanda azul
se yergue
hacia la copa de los pájaros
………………
Dos pájaros furtivos:
uno bebe agua en la fuete
el otro mira hacia atrás

*Es mi pequeña orgía
sentarme en los cafés
sola retirada
vigilando a la muchedumbre

*Hacia Estambuel
navega
el Mediterráneo
En tu cuerpo un aroma de especias

*Frío está el despertar
El amor ha vuelto
Brillará la noche

*Quiero los besos de tu carta
Abre tu boca llena de noche
Y ámame en Normandía entre manzanas

*Cae una lluvia fina
Muere el calor
La ciudad renace
………..
Dos árboles
se disputan la sombra
Un sapo mira

*En la Plaza de la Vergüenza
la cazadora nocturna ilumina a la Virgen de la Calle
La catedral extiende la ciudad
pequeños secretos y misterios
A veces nos equivocamos
pero nadie se abandona caprichosamente
al deseo y al destino

*Duermes en una canoa
sobre el lago sereno
A tu lado aves acuáticas

*La mañana
refresca mi piel:
el aire cierra tus ojos
y abre los míos

*Un sueño de amor en Flandes
Caminamos todo el día
entre el mar y la tierra
entre canales medievales
Fatigados al anochecer
la primera lluvia animó los cuerpos
el amor llegaba

*No recuerdo tu nombre
Pasado presente continuo
Curvas de polvo
Poeta casual
escribes en tu site
John Keats
Lo bello es una dicha para siempre

*Flores del campo
flores solitarias aproximadas por los sueños
En pequeños palacios abandonaron la sombra
Una nube
descubre un capullo adormecido

*Una lámpara oculta dibuja
con su luz
mi forma
Eres yo
bello fantasma

*Más allá de los árboles
en un lugar cubierto de cañas maduras
con los primeros tallos que aparecen en los surcos
quisiera quedarme en tu cuerpo cuando llegue la noche
mientras pequeñas lobas tímidas de ligeros pasos
juegan con flores en la hierba silvestre

*En su desolación
una mujer bebe el jugo de un cactus

(del libro "Señales rupestres", 2009)